miércoles, 11 de mayo de 2011

El comienzo del fin de la cultura del piquete en Argentina

Dijo la presidenta Cristina Fernandez:
"En vez de apoyarme para Presidente, pido que solucionen los hechos sin presiones"



hace un par de dias ví en "con voz propia" al periodista/escritor
Jorge Asis desarrollando un analisis de la situación actual del
gobierno. No soy un lector ni de sus libros ni de sus crónicas, ni
menos aún coincido con sus ideas. Pero hay algo interesante que se me
ocurrio rescatar y es su modo de ver la realidad post-nestor.

Yo masomenos lo leo asi: Desde 2003 hasta su muerte, nestor kirchner
impuso la agenda y el ritmo de la politica y siempre con una impronta
confrontativa. Para él la arena politica era para zanjar las
diferencias como gallos de riña, hasta eliminar al opositor. Nestor
adoptó los 70 (epoca que la vivió como joven estudiante universitario)
como la base para elaborar su discurso ideológico actual, pero ya es
por todos conocida su verdadera historia referida a su nula
participacion militante en aquellos años y su actividad profesional
posterior hasta el advenimiento de la democracia, lo que no obsta para
que eso le haya dado un carisma especial en su gestion como presidente
de la republica.
Esta combinación hizo que los movimientos piqueteros o de protesta
tengan via libre para expresarse del modo que les plazca.
Luego la politica de no represión hizo el resto hasta llegar a los
dias de hoy donde cualquier hijo de vecino te corta las calles o te
impide el libre transito o te dificulta de alguna manera tu vida
porque la de él esta muy jodida y necesita que le den pelota.

Por otro lado, cristina a partir de la desaparicion de nestor dejó ver
la persona que siempre fué (y eso se vé claramente en su trayectoria
politica en ambas camaras) Esto es, moderada, conciliadora, paciente y
sobre todo respetuosa de los demás. Una mujer con un inmenso carisma a
la que esta gestión del conflicto la va a llevar muy alto en su
apreciación por la gente.
Si ella logra (y yo creo que lo va a hacer) desarticular esta cultura
de molestar a los demás para llamar la atencion va a terminar su
mandato con una altisima opinion favorable (tal vez comparable a la
que tuvieron Lula y Bachelet). Lo que no quiere decir que deba ir por
la reelección (yo de hecho, no la votaría).

Conclusión: lo mejor que Cristina esta haciendo en este momento con
esta idea es plantear el comienzo de una nueva cultura para reclamar
por derechos vulnerados.